miércoles, 5 de marzo de 2014

Mi primer taller clandestino


La revista Singulares (si no la conocéis, ya estáis tardando) ha iniciado un ciclo llamado Talleres Clandestinos. Al principio no entendía muy bien el concepto porque es algo así como "tú vienes, pagas y yo te doy un taller y un brunch que nos llevará toda la mañana". Ya, ya, ¿pero de qué es el taller?, porque si es de punto de cruz o de técnicas de sofrito pues no, como tú comprenderás, no. "Es que es clandestino, sólo te puedo decir día, sitio y hora". Hombre, gracias! Todo un detalle!, jajajajaja!!! 

Y tras la coña, he de explicar que la directora de la revista, Belén López, es una de mis mejores amigas y que tengo fe ciega en ella y en sus proyectos. Y al igual que yo, con fe ciega nos presentamos en el taller unas 8 ó 9 personas. Y efectivamente, mereció la pena la sorpresa. 

Fue en el taller de Chus Cano, de El Sabor de lo Antiguo. Un lugar cargado de pinturas, maderas viejas y toneladas de encanto. 
Al llegar, nos estaban esperando con un delicioso y completísimo brunch a cargo de PartyPacks.
Vamos, que fiel a mi conocida falta de autocontrol, no paré la boca durante toda la mañana.
Conocí a un montón de gente guapa con oficios de lo más interesantes. Desde fotógrafos (incluso una fotógrafa de bebés), hasta una fabricante de alfombras. Yo estaba más feliz que una perdiz.
Y al final, el taller resultó ser para aprender a hacer un marco con arpillera de lo más "cuqui" (como me dijo una chica que suele decir Pepe Leal). 

Para ello tuvimos que colocarnos un delantal y poneros a lijar, pintar, encolar, etc. Fue tan divertido el proceso como satisfactorio el resultado final.

El mío quedó así de molón.

Al próximo taller voy de cabeza!

Si queréis más detalles, leed el post del blog de Singulares.

13 comentarios:

  1. Si, si, si, hay que jugársela con estas cosas. Hay por ahí un asunto de cenas clandestinas que tiene pintón. Hay que arriesgarse y disfrutar de este tipo de cosas.

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    1. Y eso? Habrá que investigarlo, no? Yo, si es comer, me apunto!

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    2. Eso, eso a comer nos apuntamos clandestina o descaradamente. Que por muchas cosas ricas nos volvemos locas.

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  2. La vaselina, Carmex de cereza, ya te cuento en la respuesta. ¿Tienes twitter? hazte hazte!! Las cenas, cuando recupere el enlace te digo (es que son eso, clandestinas)

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  3. ¿Y cuál es el precio, si no es indiscreción?

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  4. Yo vi una película de un restaurante clandestino que como plato estrella daba carne humana. Todo tenía muy buena pinta. Pujaban por las diferentes partes del cuerpo.:))

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  5. PEro que artistazaaaaa!
    Yo en esos talleres, perdería el sentido..es ver una delicatessen o cq comida bien presentada "osea cuqui" y no parar!!!!
    En fin... pena vivir en la isla, aquí clandestino, no hay nada!
    bss

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  6. A un taller de éstos, me apuntaría con los ojos cerrados ;) Qué pena no vivir más cerca para apuntarme :(..
    El marco te ha quedado la mar de bonito!
    Bss :)

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  7. Todo lo que tiene el Clandestino al lado me suena genial! Conchy un menú a base de partes del cuerpo no mucho, me ha dado un poco de mal rollo... (como guión de una película nada mal, por cierto), me acuerdo de aquél caso de un Caníbal que quedó con un tío para comerse cierta parte del cuerpo, hay gente para todo está claro... (uno de ellos murió)
    Volviendo al taller... pinta muy bien, en Madrid os lo montáis muy bien! ;)
    Me quedo mirando la página de tu amiga. Un beso!!

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  8. Que chulo!! nunca había oído hablar de algo así. La verdad que puede ser un arma de doble dilo, porque como bien dices mira que si te ponen a hacer croquetas! jajaja, aunque bueno! a mí tampoco me vendría mal un taller de ese tipo.... ;)

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  9. Yo quiero apuntarme al próximo. Espero que me avisen.
    Por cierto muy chula tu casa en Singulares Magazine.

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  10. Para las que me habéis podido más detalles.
    Este primer taller ha costado 70€, pero no sé cuánto costarán los demás.
    Si queréis suscribiros para que os lleguen las últimas noticias podéis escribir un correo a talleresclandestinos@singularesmag.com

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  11. Oh, qué envidia. Me encantaría ir a uno de estos, aunque me pillan algo lejos... A ver si alguno coincide con un puente "apañaíllo".

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