Año nuevo, bici nueva.

Pues sí. Ahora tengo una bici chula chula requetechula. 

Parece ser que Mr. Tyler ha conseguido convencer a Papá Noel de que este año me he portado super bien, y él, que a sus años ya no debe de estar para muchas discusiones, me ha premiado con una bici maravillosisisisisisisssima. 

O no?

Y yo, que me sé al dedillo eso de que de bien nacido es ser agradecido, he hablado con los Reyes Magos para que le trajeran al Mister algún regalillo chulo. Y le/me han traído un fin de semana en una casita preciosa perdida en los montes de Madrid, donde hemos hecho lo que más nos gusta: estar pegados como lapas, jjjjjjj....

La bici se ha venido con nosotros, por supuesto, no era discutible. 

 

 

 

 

 

Y qué a gusto hemos estado el Mister y yo. Tanto tanto, que hemos decidido dar un pasito más para estar aún mejor. En estos meses tan intensos nos hemos dado cuenta de que despertarnos juntos no es una opción, sino una necesidad. Así es que empieza la búsqueda de pisito mono para dos en el centro de Madrid. 

Requisitos:

- Dos dormitorios. Por aquello de tener adónde ir en los Madrid-Barça.

- Cocina grande, que es donde más tiempo vamos a pasar. 

- Suelo de madera para dos frioleros como nosotros. 

- Luz natural para no perderme ni uno sólo de tus perfiles...

Mr. Tyler, gracias por el regalo. El de los 9 meses de amor incondicional, digo.

Usted ha llegado a mi vida para ponérmela patas arriba. Y gracias a Dior!

Y, por cierto, feliz 2013, queridos míos!