Tengo pendiente hablar de mi obsesión por el reciclaje y los muebles antiguos, pero adelantaré que una de mis fijaciones son los cajones. En más de una ocasión he estado a punto de llevarme alguno que he encontrado tirado en la calle, pero no lo he hecho porque, aunque bonito, no sabría qué hacer con él. Pues bien, en Alemania, a una chica llamada Franziska Wodicka se le ocurrió reutilizar cajones sueltos para crear combinaciones únicas sobre estructuras hechas a medida. El resultado es de lo más sugerente y, de paso, reciclamos, que en el planeta ya no caben más deshechos.
Fotos: Schubladen
No hay comentarios:
Publicar un comentario