La Favourite Things de Chen Karlsson. Un pequeño mundo perfecto para exponer todas tus tonterías y dar rienda suelta a tu cretividad, absurda en mi caso.
La primera vez que la vi fue en la inauguración de showroom en Madrid. Éstas son las fotos que hice.
Y no la había vuelto a ver hasta que llegué a la tienda Fleux, en el barrio Le Marais de París (una pasada de tienda que os recomiendo encarecidamente visitar, aunque sólo sea virtualmente). Allí nos dijeron que no
había distribuidores oficiales en España, así es que no nos lo pensamos
demasiado y la compramos. La dependienta fue a buscar la lámpara al almacén y cuando la trajo abrió la caja para ver que no estuviera rota. Efectivamente, estaba en perfecto estado, así es que tarjetazo y vuelta a casa con cara de satisfacción y el bolsillo pelao.
Y todo perfecto hasta que toca colgarla. Sacamos la lámpara y vemos que tiene 4 agujeros en la parte de arriba y no sabemos para qué sirven. Miramos en la caja pero no hay nada. Y ahora qué...
Nos ponemos a buscar fotos en internet y descubrimos que la lámpara tiene un casquillo y un sistema de enganche especial para ella pero que nosotros no tenemos. Quiere decir que nos hemos gastado una pasta en una lámpara a la que le faltan las piezas para poder cogarla. Genial.
Ya sabéis que yo soy propensa a liarla parda en los viajes. Recordad si no este post. Pero esta vez no estaba sola, así es que me consuelo repartiendo la culpa, jjjjjjj...
Ahora tenemos dos posibilidades: escribir a la tienda y que nos quieran mandar las piezas que faltan o ingeniárnoslas cual McGiver y salir del apuro nosotros solitos con un alambre y un chicle.
Sea como sea, acabaremos colgándola. Ya tenemos planeadas un montón de escenas para exponer. Queremos ir cambiando a menudo las cosas para no aburrirnos y darle vidilla. La verdad es que un invento genial para darle protagonismo a tus cosillas preferidas. Empezaremos por una Barbie vieja, sucia, desnuda y con pinta de putón (adquirida en el Rastro a 0,50 céntimos), que colocaremos dentro, pero dejándole la cabeza y la melena colgando por fuera. Ya os iré poniendo fotos.
Tula, me encanta, no las había visto nunca. Son un reto a la imaginación. Quiero una. Besos y gracias por el descubrimiento.
ResponderEliminarOstras!!! Que pena. Ya me contarás.
ResponderEliminarUn beso
Me encanta la idea de meter barbies, o barriguitas de esos de cuando era pequeña jejejjee....
ResponderEliminarMuy chula !!!!!!!
muas
Vamos a ver, Tula, bonita, que no es que quiera yo faltar, ni mucho menos, sin acritud ninguna, te comento: Eso que tú llamas "Tu lámpara" es en realidad "Tu media lámpara", por la que tendrás que luchar con mis abogados el día en que llegue un hipotético divorcio (Dior o Buda no lo quieran). Al igual que te sucederá con la Plastic Chair de los Eames y con otras muchas cosas. Y maldad por mi parte, ninguna, sólo soy tu novio y hago lo que de mí se espera, hacerte la vida un poquito más complicada. ¿Qué esperabas?
ResponderEliminarY ya, cambiando de tema, para quitar hierro al asunto..."Barbie con pinta de putón" ¿No es una redundancia?
Desde el amor que te profeso from lo más profundo de mi alma, se despide y te quiere:
Mr Tyler.
P.D.: ¿Has comprado los cereales que te dije? ¡Que no se te olvide!
Esto es amor, y además cuidando las funciones intestinales.
EliminarLa lámpara me gusta por la cantidad de opciones que ofrece lástima que no la viese antes de decorar el pisito, bueno eso de decorar ha sonado hasta pretencioso hicimos lo que pudimos! Acabo de descubrir tu blog y me ha enganxado!
ResponderEliminarUn saludo!!
Sara.
La cabeza de Barbie colgando por fuera me parece fundametal!!
ResponderEliminarBsssss
Es genial ésta luminaria!! super original!!
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